A medida que el bendito mes de Ramadán llega a su fin y el mes de Shawal se acerca, la gente anticipa ansiosamente la llegada del día de Eid. Sin embargo, es en este momento cuando surge el desafío: el desafío de la Istiqamah (firmeza). 

A lo largo del mes de Ramadán, la gente se esfuerza en la Ibadah (adoración), hace todo lo posible por abstenerse de todos los pecados y, en general, reforma sus condiciones y mejora sus vidas. Especialmente en los últimos diez días, los hombres llenan las mezquitas al máximo y muchas mujeres en casa pasan horas por la noche en la Musal’lah. 

Desafortunadamente, para muchas personas, el final de Ramadán es como el comienzo de un feriado: un feriado de las adoraciones, deberes y obligaciones del Din. Esta mentalidad es la de los incrédulos que trabajan durante la semana y luego se divierten el fin de semana, o trabajan duro durante el año y luego satisfacen todos sus malos deseos en diciembre. 

Para un musulmán, puede haber una pausa en el trabajo, los negocios o la escuela. Sin duda tampoco se espera que uno se esfuerce fuera de Ramadán al mismo nivel que se esforzó en Ramadán. Sin embargo, al mismo tiempo, NO hay feriados, vacaciones o descanso de los mandatos y obligaciones del Din y nuestra Ibadah para Al’lah Ta’ala. Más bien, es a través de permanecer firmes, constantes y consistentes en el Din que progresaremos y lograremos entrar en Yannah. 

En este sentido, se informa que en una ocasión un Sahabi llamado Sufyan Bin Abdil’lah Saqafi (radiyal’lahu anhu) vino donde Rasulull’ah ﷺ y le dijo:

“Oh, Mensajero de Al’lah ﷺ! Por favor, dame algún consejo con respecto al Islam, que sea tal (es decir, tan amplio y completo) que no necesitaré pedirle otro consejo a nadie después de ti”. Rasulul’lah ﷺ le respondió: “Di: ‘He traído Iman (Fe) en Al’lah’, y luego permanece firme (en todos los mandatos de la sharía)”.

[Sahih Muslim #159]

En Ramadán podemos estar recitando un Yuz (supara) o medio Yuz del Corán diariamente, según nuestra capacidad. Ahora que Ramadán está llegando a su fin, no debemos despedirnos de nuestro Corán y dejarlo en la gaveta por otros doce meses. En Ramadán, nos despertamos a la hora del Suhur y ofrecemos el Salah de Tahayyud. No permitamos que Ramadán sea el único momento de nuestras vidas en el que ofrecemos el Salah de Tahayyud. En Ramadán, somos exigentes con nuestra forma de vestir, no vemos películas, no escuchamos música y nos abstenemos de cometer pecados en general. No debería ser que después de Ramadán recaigamos y volvamos a nuestros males y vicios. 

En lugar de ello, utilicemos este bendito mes como medio para lograr un cambio positivo permanente en nuestras vidas, cuyos efectos permanecerán con nosotros durante todo el año. No seamos “adoradores estacionales” que mostramos celo en el mes de Ramadán, pero al avistar la luna Shawal, damos la espalda y desaparecemos. 

Se dice que el renombrado santo Bishr Hafi (rahimahul’lah), fue informado una vez de ciertas personas que se esfuerzan en hacer Ibadah durante Ramadán (pero que son negligentes fuera de Ramadán). Ante esto, comentó:

“¡Cuán malas son esas personas (es decir, qué mala es su actuación) que sólo reconocen verdaderamente a Al’lah Ta’ala en Ramadán! El que es verdaderamente piadoso es el que adora a Al’lah Ta’ala y se esfuerza durante todo el año”. 

Se menciona de manera similar que una vez le preguntaron a Sheyj Shibli (rahimahul’lah): “¿Cuál es más virtuoso: (el mes de) Rayab o Shaban?” En respuesta, Sheyj Shibli (rahimahul’lah) dijo:

“Conviértete en un ‘Rabbaani’ (una persona devota de Al’lah Ta’ala todo el tiempo) y no seas un ‘Shabani’ (alguien que sólo se dedica a Al’lah Ta’ala en Shaban)”.

[Lataif-ul Ma’arif pág. 396]

De la misma manera, no deberíamos ser “Ramadanis”, personas que sólo son musulmanes devotos, fieles y obedientes durante Ramadán. Más bien, debemos esforzarnos por ser “Rabbanis” en todo momento. 

Que Al’lah Ta’ala nos bendiga con Istiqamah y haga de Ramadán el punto de cambio en nuestras vidas, amén. 

Este artículo fue preparado gracias a la colaboración de USWATUL MUSLIMAH.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *